domingo, 10 de enero de 2016

¿Por qué el Nombre de Jehová ya no aparece en el Nuevo Testamento?


Primero tenemos que identificar quién es Jehová en el Antiguo Testamento, para así poder determinar por qué ya no es llamado Jehová en el Nuevo Testamento.
Hay un pasaje clave en el Antiguo Testamento que es una profecía y dicha profecía se cumple en el Nuevo Testamento y de manera inequívoca nos presenta quién es Jehová en el Nuevo Testamento.

Isaías 40:3
Voz que clama en el desierto:
«¡Preparad un camino a Jehová;
nivelad una calzada
en la estepa a nuestro Dios!


Con respecto al ministerio de Juan Bautista, en él se cumple la profecía de Isaías, así que Cristo, a quien Juan anunció era y es Jehová.
Nuestro Señor Jesucristo es Jehová, Él existió desde la eternidad, de igual modo Él es el Ángel que le apareció a Abraham, a Jacob y a Moisés en la zarza, y como una Voz que hizo temblar la tierra. Claramente Jehová se le identifica a Cristo en el Nuevo Testamento.

Juan dijo a los fariseos cuando le cuestionaron sobre su persona:
Juan 1:23
Dijo:
--Yo soy “la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor”, como dijo el profeta Isaías.


Juan anunciaba a Jesucristo y su Reino. Por lo tanto no queda duda de que Jehová es Jesucristo.
Un testimonio escritural sobre esta verdad está en el Salmo 98:7-9
Brame el mar y su plenitud,
el mundo y los que en él habitan;
8 los ríos batan las manos,
regocíjense todos los montes
9 delante de Jehová,
porque vino a juzgar la tierra.
Juzgará al mundo con justicia
y a los pueblos con rectitud.


Estos versos son una descripción de la Segunda venida del Mesías, y quien viene a juzgar la tierra con justicia es Nuestro Señor Jesucristo quien en el Antiguo Testamento es llamado Jehová, y lo ratifican las últimas palabras de la Biblia:
"Amén; sí, ven Señor Jesús"

Él es Jehová, está escrito en el Salmo 83:18
Y conozcan que tu nombre es Jehová;
¡tú solo el Altísimo sobre toda la tierra!

Con esto al mismo tiempo se presenta la prueba irrefutable de la Deidad de Cristo, porque a Él se le llama legítimamente Jehová y podemos leer que a Él se le da constantemente el nombre de Jehová quien es Dios.
Jeremías 23:5-6
»Vienen días,
dice Jehová,
en que levantaré a David renuevo justo,
y reinará como Rey, el cual será dichoso
y actuará conforme al derecho y la justicia en la tierra.
6 En sus días será salvo Judá,
e Israel habitará confiado;
y este será su nombre con el cual lo llamarán:
“Jehová, justicia nuestra”.

Esta profecía declara que el Renuevo Justo, hijo de David, que es un Rey, será llamado Jehová, justicia nuestra. Sólo Cristo y nadie más es quien ha sido hecho para nosotros justicia y sólo en Cristo fuimos hechos justicia de Dios.

Del mismo modo el Jehová que subió a lo alto y llevó cautiva la cautividad, como lo expresa el Salmo 68:18, no es otro que el mismo Cristo que expresa Efesios 4:8-10.
Por lo cual dice:
«Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad,
y dio dones a los hombres».
9 Y eso de que «subió», ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? 10 El que descendió es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo.


Así que, El Padre le envió mensajero a María, para que al Hijo que le iba a nacer, le pusiera por Nombre Jesús.
Mateo 1:21
Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados».
Su Nombre es Jesús, el Cristo de Dios, Nuestro Señor Jesucristo y Él siempre ha sido y será El Rey, Jehová de los Ejércitos.
Isaías 6:5
Entonces dije: «¡Ay de mí que soy muerto!, porque siendo hombre inmundo de labios y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos».